El entrenamiento de fuerza para ciclistas ahora está de moda y no es raro ver a compañeros haciendo sentadillas o trabajando el CORE dos o tres días por semana. Sin embargo, hasta hace muy poco tiempo, esto era impensable.
Es cierto que los profesionales no querían saber nada del gimnasio hasta hace muy poco; por ese motivo los aficionados imitábamos su comportamiento y hacíamos lo mismo. Sin embargo, algunos amantes del MTB empezaron a trabajar la fuerza en el gimnasio… y los resultados llegaron como por arte de magia.
Por otro lado, es cierto que los pros en pretemporada (e incluso algunos en mitad de la temporada) ahora sí hacen entrenamiento de fuerza, sobre todo centrado en el CORE. Entonces en qué quedamos… ¿es bueno o es malo para los ciclistas? ¿mejora el rendimiento o lo empeora?
Entrenamiento de fuerza para ciclistas: ¿es bueno o malo?
La respuesta es muy sencilla: porque no tienen tiempo ni para realizarlo con calidad ni para recuperarse de ese esfuerzo. El entrenamiento de fuerza no es compatible con hacer 20.000 o 30.000 kilómetros anuales durante la temporada. Sin embargo en un ciclista aficionado o amateur mejora la fuerza y, más importante si cabe, la salud. Es decir, este tipo de entreno es perfecto para ti.
El gimnasio siempre ha estado apartado del mundo del ciclismo por el miedo a ganar masa muscular. «¡A ver si me voy a poner hecho un animal!» Por suerte no es así. Ganar volumen es una tarea muy complicada y sacrificada que exige un entrenamiento específico de hipertrofia y un superávit calórico. No es eso lo que os proponemos.

Me da igual zapatillas, bicicleta que bañador. Si está relacionado con los deportes de resistencia y ese agradable sufrimiento que tanto nos gusta, ¡cuenta conmigo!